Talleres del Agua: un ejemplo de innovación creativa que ahora imitan en China

Talleres del Agua transformó su mercado cuando adaptó las bombas de calor para piscinas de forma que entraran en las unidades exteriores para el aire acondicionado

Si la innovación como concepto cupiera en un lugar concreto, para quienes trabajan en Talleres del Agua, empresa radicada en Los Corrales de Buelna, ese lugar sería una bomba de calor para piscinas. Un elemento en el que se basa, en parte, el éxito de esta compañía, que forma parte de un gigante llamado Fluidra, número 1 del mundo en el mercado de piscinas tras su fusión con Zodiac en el año 2018, y cuyas cifras hablan por sí solas: tan sólo en la primera mitad de 2022, las ventas alcanzaron los 1.445 millones de euros, un récord que se traduce en un incremento del volumen de negocio del 22 por ciento.

Talleres del Agua es una de las empresas que producen para Fluidra, cuya sede se encuentra en Sant Cugat del Vallés y que, en la actualidad, tiene plantas productivas repartidas a lo ancho del globo: Estados Unidos, Australia, China, México, África, etc., aunque la mayor parte de las fábricas se encuentran en España. Una de esas fábricas es Talleres del Agua, empresa fundada en 1996 que, en el inicio de su andadura, se centró en la obra civil de fabricación de piscinas. “Con el tiempo se empezaron a fabricar bombas de calor”, tal y como señala Carlos Pérez, gerente de Talleres del Agua, para quien uno de los hitos de esta compañía -que en la actualidad se dedica a suministrar a Fluidra equipos de climatización para calentar o enfriar agua (además de deshumectar) tanto a nivel residencial como comercial- fue la idea de meter esas bombas de calor, “que eran bastante grandes y feas”, en carcasas destinadas, hasta aquel momento, al aire acondicionado.

“Nuestros clientes no querían que se vieran, tendían a esconder las bombas de calor”, recuerda Carlos Pérez, y por ese motivo, en el año 2005, técnicos de la empresa comenzaron a plantearse la creación de un modelo mucho más pequeño, del gusto de quienes decidieran instalar piscinas en sus residencias. 

Una idea inicial que los llevó, finalmente, a China, con la idea de comprobar si era factible meter dentro de la carcasa de los equipos de aire acondicionado que va en el exterior de los edificios la voluminosa bomba de calor.  “Fue una idea brillante”,  a juicio del gerente de Talleres del Agua, “porque se trata de una caja compacta que ya incluye un ventilador”.

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“Adquirimos esas carcasas y empezamos a trabajar en el diseño de una bomba de calor que cupiera dentro y lo conseguimos”, rememora Carlos Pérez. De hecho, el resultado de este proceso de innovación se tradujo en un éxito de ventas “impresionante”, que comenzó con el lanzamiento del primer producto en 2005. Las ventas fueron creciendo año tras año, y había clientes que incluso contrataban diseños singulares de la carcasa exterior para sus propios equipos. El pico de ventas se produjo en el año 2011, cuando se alcanzó la cifra de 15.000 unidades. Sin embargo, una vez que empresas chinas entraron a competir en el mismo mercado, las ventas fueron bajando lentamente, pero de forma constante, y Talleres del Agua se vio en dificultades para competir con los bajos costes de producción del gigante asiático.

La empresa supo reaccionar a tiempo, retomar su ‘core business’ y, a pesar de que tuvo que acometer recortes tanto en personal como en medios, logró reducir el impacto.

Con la lección aprendida, y en el corto plazo, Talleres del Agua tiene previsto volver a fabricar bombas de calor para piscinas dentro del segmento residencial con materiales de calidad, características innovadoras y estética transgresora, que permita competir con el producto de bajo precio que oferta el mercado chino.

Talleres del Agua pasó a formar parte de Fluidra en 2001, aunque de las dos líneas de trabajo (obra civil y equipos de climatización) la compañía catalana se quedó con la fabricación de maquinaria y ahora, desde Los Corrales de Buelna, se hacen cargo de fabricar los equipos de climatización. “La bomba de calor es lo que se va a imponer”, sostiene Carlos Pérez, “porque es el único equipo fabricado por la humanidad con rendimiento mayor de 1”. 

Por el momento, Talleres del Agua tiene la vista fija en la entrada en funcionamiento del nuevo laboratorio que se está ultimando en una nave industrial cercana a las instalaciones, en el que se hará la validación de los nuevos productos. Se trata de una infraestructura única en Cantabria que abre la posibilidad, en un futuro, de acreditarse en la Entidad Nacional de Acreditación (ENAC) y, aunque no sea un objetivo actualmente, la inversión en esta instalación se ha realizado teniendo esa oportunidad en mente. 

Esta nueva equipación consiste en una cámara climática que permite mantener, de forma constante, temperaturas que van de los -20º a los 45º en equipos a testear que generen hasta 60 kw de potencia frigorífica o calorífica. Un laboratorio en el que trabajarán tres ingenieros del equipo de I+D+i a tiempo completo, que dedican el 75 por ciento de su jornada al desarrollo de producto y, el resto, a mejoras incrementales de productos ya existentes, como optimización de software o de funciones.

Además, Talleres del Agua se encuentra inmersa en estos momentos en instaurar la industria 4.0, con toma de datos en tiempo real, dos pantallas táctiles por puesto de trabajo con indicadores de fabricación en directo y con la posibilidad de realizar cualquier consulta desde el teléfono móvil. “Estamos cambiando todo nuestro gestor para absorber ese flujo de datos”, indica Carlos Pérez, para quien “la calidad es nuestra razón de ser”, algo que ha obligado a esta empresa a “innovar mucho, tanto en lo que se refiere a la validación de producto como a la trazabilidad de los datos”, para no dejar ningún cabo suelto en el complejo proceso de desarrollo de producto.

Talleres del Agua se enfrenta a estos retos con el objetivo puesto en retomar la producción de una innovación que surgió en esta empresa de Los Corrales de Buelna: la bomba de calor en formato reducido. Un componente fundamental para las piscinas residenciales que esta compañía cántabra volverá a recuperar de cara a fabricar equipos de alto nivel cualitativo para los consumidores más exigentes, algo que es posible a raíz de la fusión de Fluidra Legacy con Zodiac Legacy, ya que la segunda se encuentra más centrada en el segmento premium. Esto posibilita, además de soportar una estructura de fabricación europea, alcanzar unos estándares de calidad, control, trazabilidad y servicio postventa superiores a los productos procedentes de China. “Ese producto premium es el que nos está haciendo crecer”, concluye Carlos Pérez.

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